Médicos, editores de revistas
Como queda demostrado hasta el día de hoy, los médicos mexicanos tienen un papel destacado en la historia del país. Esto se debe, entre otras razones, a que sus conocimientos, puestos al servicio de la sociedad, son indispensables para lograr la salud de las personas. Algunos médicos lo hacen directamente en la atención a pacientes, otros como maestros y, otros más, ayudan a crear medicamentos y vacunas para prevenir enfermedades y salvar vidas.
Desde inicios del México independiente los médicos han participado también en otros ámbitos, como en el político, y en la edición de revistas científicas.
Todos sabemos que en el siglo XXI las revistas científicas de investigación sirven para dar a conocer los últimos descubrimientos en las ciencias. Sin embargo, al explorar en la memoria y los archivos de las revistas médicas mexicanas de la primera mitad del siglo XX, podemos darnos cuenta de que, si bien publicar conocimiento nuevo era muy importante, aparecían noticias o incluso poemas y caricaturas. Algunas de estas revistas eran técnico-profesionales, es decir, que eran como un periódico de noticias para los médicos. Aparecían anuncios de las reuniones médicas que organizaban, publicidad de medicamentos, instrumentos y libros, noticias de sus actividades profesionales y también sociales como bodas y graduaciones, o bien textos para la defensa de sus derechos como profesionales.
Acostumbrados a que mucho del conocimiento se puede encontrar hoy en internet, desconocemos que muchas de las revistas científicas mexicanas realizadas en la primera mitad del siglo XX están fuera de la red. De ahí la importancia de poner al alcance de los mexicanos parte de este patrimonio histórico, cultural y científico que se reflejan en páginas de revistas médicas. Nos interesa dar a conocer cómo era importante para los médicos de esta época difundir el conocimiento. Ellos mismos se encargaban de todo lo necesario para hacer una revista como conseguir los textos, revisarlos, hacer un diseño atractivo, contar con dinero para hacer el editar el siguiente ejemplar y pensar en la mejor forma de que llegara a los lectores dentro y fuera del país. Para muchos, estas labores editoriales eran altruistas, pues dedicaban tiempo a hacer las revistas sin tener un beneficio económico. Hacían esto a la vez que tenían sus actividades de servicios profesionales e incluso institucionales como directivos de hospitales y escuelas. Algunos de ellos llegaron a ser destacados maestros y otros más rectores de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Los acervos de la Biblioteca y Hemeroteca Nacionales de México nos ofrecen una gran oportunidad de hacer memoria de los médicos que ayer se preocuparon por hacer una contribución a su país mediante la comunicación científica y profesional. De ahí provienen estos fragmentos de las revistas médicas que son sólo una pequeña muestra de todo lo que existe por explorar.
Dalia Valdez Garza