Desastres
Inundación de la Ciudad de México.
México, D.F., ca. julio de 1952.Montero aprovecha el juego de reflejos producidos por las inundaciones de 1952 para crear una impresionante composición gráfica. La esquina es el cruce de Paseo de la Reforma y Bucareli, entonces sede del “Caballito” de Manuel Tolsá, detrás del cual puede verse el edificio Corcuera, que fue demolido en 1957.
Uno de los tópicos de la fotografía de prensa es la cobertura de las noticias sobre desastres naturales. Montero no escapó de tales encargos: realizó una multitud de imágenes de inundaciones, deslaves y temblores. De éstas, sobresalen las de las inundaciones en la Ciudad de México en 1952 y en Salamanca, Guanajuato, en 1958: son tomas en las que, si bien se documenta el efecto desastroso del desbordamiento de las aguas, también se muestra la improvisación creativa del pueblo y, sobre todo, el sentido del humor ante la tragedia.
Columna de la Independencia.
México, D.F., 28 de junio de 1957.El de 1957 fue uno de los terremotos más intensos que han sacudido a la Ciudad de México: con 7.7 grados en la escala de Richter, el temblor sorprendió a los capitalinos en la madrugada y provocó la muerte de alrededor de 700 personas. El ángel caído de la Columna de la Independencia se convirtió en un símbolo de aquel desastre.
Paseo en canoa por el centro de la Ciudad de México.
México, D.F., ca. 1951.
Prohibido pescar.
México, D.F., ca. 1952.A pesar de los trabajos realizados en la década precedente, en los años cincuenta se sufrieron frecuentes inundaciones. Por algunas de las calles, automóviles y camiones seguían circulando, pero había muchos problemas para transportarse. Sobre un poste de esta calle del centro del D.F. se alcanza a leer un aviso que dicta: “Por orden del Depto. Central se prohíbe pescar”.