Sala 2- Tema 1 - Escritura alfabética y manuscritos en lenguas indígenas

El libro europeo en la Nueva España

El arribo de españoles al Nuevo Mundo implicó la llegada de objetos, técnicas y materiales desconocidos por los nativos de estas tierras; uno de ellos fue el libro en el formato y estructura a la usanza del Viejo Mundo. Si bien en el México antiguo ya existían diversas formas de cultura gráfica y escrituraria, los conquistadores y religiosos europeos desembarcaron con un sistema de escritura distinto que modificó el proceso de registro, comunicación y lectura de los indígenas. Fueron los evangelizadores los encargados de transmitir a los habitantes originarios el sistema alfabético que en muchas ocasiones se combinó con imágenes que remitían a la tradición pictográfica indígena.

Los libros manuscritos que se presentan en esta sección dan cuenta de ese uso mixto y compartido de los elementos visuales y textuales, algunos de los cuales fueron utilizados por los frailes para el aprendizaje de las lenguas nativas y la enseñanza del catolicismo. Otros de los libros que se muestran aquí narran los intentos por parte de los indígenas para comprobar la posesión de sus tierras y la nobleza de su linaje; y unos más presentan traducciones de textos clásicos latinos al náhuatl.

El libro europeo en la Nueva España

El arribo de españoles al Nuevo Mundo implicó la llegada de objetos, técnicas y materiales desconocidos por los nativos de estas tierras; uno de ellos fue el libro en el formato y estructura a la usanza del Viejo Mundo. Si bien en el México antiguo ya existían diversas formas de cultura gráfica y escrituraria, los conquistadores y religiosos europeos desembarcaron con un sistema de escritura distinto que modificó el proceso de registro, comunicación y lectura de los indígenas. Fueron los evangelizadores los encargados de transmitir a los habitantes originarios el sistema alfabético que en muchas ocasiones se combinó con imágenes que remitían a la tradición pictográfica indígena.

Los libros manuscritos que se presentan en esta sección dan cuenta de ese uso mixto y compartido de los elementos visuales y textuales, algunos de los cuales fueron utilizados por los frailes para el aprendizaje de las lenguas nativas y la enseñanza del catolicismo. Otros de los libros que se muestran aquí narran los intentos por parte de los indígenas para comprobar la posesión de sus tierras y la nobleza de su linaje; y unos más presentan traducciones de textos clásicos latinos al náhuatl.

Cantares mexicanos

En este libro mexicano del siglo xvi se pueden apreciar tanto elementos indígenas como los de tradición europea: en el primer caso encontramos la escritura pictográfica y los textos en náhuatl y en el segundo, el uso del alfabeto latino y el papel de trapo como soporte, así como el formato de libro cosido. El contenido de estos cantares es diverso pues incluye 20 himnos sagrados y un calendario de festividades para los nahuas, además de la traducción a lengua mexicana de las fábulas de Esopo.

Cantares mexicanos, siglo xvi, Biblioteca Nacional de México.

Códice Techialoyan de Cuajimalpa

Si bien con el pasar de los años prevaleció el uso del cuadernillo de folios cosidos, continuó produciéndose el formato de códice que se desplegaba a manera de biombo. Los denominados códices Techialoyan son un conjunto de documentos realizados entre 1685 y 1703 por grupos de indígenas del centro de México, con los que pretendían demostrar al gobierno novohispano su pertenencia legítima de la tierra desde tiempos prehispánicos. Existen aproximadamente 50 ejemplares de códices tipo Techialoyan y están escritos en náhuatl y latín, sobre papel amate y tinta ferrográfica.

Códice Techialoyan de Cuajimalpa, siglo xviii, Archivo General de la Nación.

Diccionario en otomí

Durante el siglo xvi la labor de cristianizar a los indígenas recayó en las órdenes mendicantes —franciscanos, dominicos y agustinos—, quienes debieron aprender la lengua de los nativos para así lograr su conversión e introducirlos al régimen monárquico como súbditos del rey. Este manuscrito que se encuentra en la Biblioteca Nacional de México es un diccionario de términos ordenados alfabéticamente en español y su correspondencia en otomí. Al final contiene un listado de palabras relacionadas con los parentescos, como hermano, sobrino, tío. Su autor fue un religioso, quien lo hizo durante la evangelización; asimismo, sirvió de instrumento de consulta para los interesados en comunicarse en esa lengua.

Diccionario en otomí, 1640-1699, Biblioteca Nacional de México.

Códice Sierra-Texupan

Este libro de cuentas denominado Códice Sierra es un registro de los ingresos y egresos del pueblo de Santa Catalina Texupan, ubicado en la Mixteca Alta del estado de Oaxaca. En este manuscrito podemos encontrar la combinación de elementos indígenas y españoles, pictográficos y textuales que dan cuenta de la participación de indígenas que sabían náhuatl, mixteco y castellano.

Códice Sierra-Texupan, 1550-1564, Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.