Después de meses de renovación, el 15 de julio de 2015 tuvo lugar la reinauguración de la Casa de México. Salvo por algunas mejoras realizadas bajo la dirección de Jorge Silva Castillo en 1976, ya habían transcurrido más de 60 años sin que se hiciera una reforma profunda a sus instalaciones. El funcionamiento y uso constante durante tanto tiempo empezaba a evidenciarse en varios de sus espacios, además de que nuevas normas y materiales de construcción fueron estableciéndose; por todo ello, se planteó la apremiante necesidad de restaurar el inmueble y realizar una renovación que correspondiera con las exigencias de la actualidad en términos de tecnología. El objetivo es ofrecer condiciones que favorezcan la movilidad y el intercambio de ideas en el mejor ambiente posible.
La rehabilitación de la Casa fue realizada gracias al apoyo de la sep y con la participación del Instituto Nacional de la Infraestructura Física Educativa (inifed) como asesor y supervisor de la obra. Destacan la remodelación de la fachada, el diseño del interior y las mejoras en la accesibilidad; además, se supervisaron cuestiones de seguridad estructural y rendimiento térmico, así como la integración de nuevas habitaciones y un rediseño de espacios privados y comunes, como los módulos sanitarios, y de la biblioteca Sor Juan Inés de la Cruz que, incluso, aprovechó para incrementar su acervo con más colecciones bibliográficas. Participaron en el evento de reapertura autoridades francesas y mexicanas: Thierry Mandon, secretario de Estado para la Enseñanza Superior e Investigación de Francia; Marcel Pochard, presidente de la CiuP, y el maestro Efrén Rojas Dávila, subsecretario de Educación Superior en representación del secretario de Educación Pública. En palabras del entonces embajador de México en Francia, Agustín García-López Loaeza, “la rehabilitación fue realizada a fin de fomentar los intercambios interculturales, así como promover el México Contemporáneo en Francia”. Destacamos documentos de reciente creación, como dos imágenes de abril de 2021, de una cápsula del tiempo que encierra diversos recuerdos para las siguientes generaciones, y marca el primer confinamiento en su interior, como se puede leer en la placa, “se encuentran recuerdos de las experiencias vividas durante la crisis sanitaria de la covid-19”; igualmente se ha plantado un hermoso cerezo en señal de esperanza. Contamos también con dos imágenes de 2020: una acuarela realizada por César Raymundo González Vargas y un dibujo de Emilio Reyes Molina, que dan cuenta de la interpretación artística en el marco de la pandemia. Por último, destacamos el ensayo ganador del concurso “México lindo y querido si muero lejos de ti”, en el marco de la semana de América Latina en París, del residente Andrés Uribe, titulado Claraboya, en el que plasma su sentir lejos de su hogar: “En este ensayo expongo las emociones, dudas y premisas que tuve que pasar, al irme de casa [en México] en plena crisis sanitaria…”