Desde su inicio, esta empresa fue pensada sin fines de lucro, por lo que se creó un fideicomiso apoyado por organismos del Estado para que lo sustentara. La editorial fue muy bien acogida, tanto que para 1939 ya no sólo se contemplaban libros relacionados con la economía, sino que se crearon las colecciones de ciencia política y de historia. Además, comenzó a realizar traducciones de textos clásicos y obras indispensables en estas mismas materias y para mediados de los cuarenta inauguró su primera filial en Buenos Aires, Argentina. Así, según datos de su sitio oficial, durante sus primeros 15 años de existencia se publicaron 342 títulos y para el periodo de 1948 a 1965, más de 800. Para los años cincuenta, el Fondo ya era referente y símbolo de la cultura nacional y había extendido su influencia a toda Iberoamérica. En la colección que presentamos para recordar la creación de esta institución tan relevante para la vida mexicana, mostramos algunas obras que forman parte de su catálogo.