Parte notable de su epistolario personal son las cartas que dirigió a Diego de Mesa, escritas de su puño y letra, igualmente interesante son sus reflexiones mecanografiadas, a propósito de la obra de su amigo Alfonso Michel, o bien el redactado por Juan Crespo de la Serna a propósito de sus creaciones. Esta pequeña muestra da cuenta de cómo los escritos también integran su gran legado.

Asimismo, el MMAC Juan Soriano enriquece la oferta cultural de Cuernavaca, al abocarse al arte contemporáneo a través de exposiciones temporales en las que se pretende difundir el trabajo de jóvenes artistas para el disfrute de los morelenses y sus visitantes. Por sus dimensiones ha devenido en el lugar expositivo más amplio de todo el estado junto con sus dos amplias salas de exposición: La Galería Central y el Cubo, más un foro abierto y un sitio multidisciplinario; para los interesados y expertos, cuenta con una biblioteca especializada. La institución ofrece además de la difusión del arte contemporáneo una serie de talleres, visitas guiadas, proyecciones de cine y más.