Pancho Villa y su ejército invaden Columbus, Nuevo México
9 de marzo de 1916
La villa de Columbus, localizada en el condado de Luna, en Nuevo México, fue testigo de la única vez en la que un ejército latinoamericano atacó territorio estadunidense. El 9 de marzo de 1916, una fuerza mexicana de 500 hombres perturbó la tranquilidad de ese solitario y desconocido poblado. Al grito de “¡Viva Villa!” y “¡Viva México!”, el general revolucionario Francisco Villa, al frente de los invasores, libró una batalla de aproximadamente seis horas que casi destruyó la localidad. Pero el gobierno de los Estados Unidos no se quedó de brazos cruzados.
Según relatan los historiadores Pedro y Luis Arturo Salmerón, como respuesta, el vecino país del norte envió hacia México una expedición punitiva formada por 4,800 soldados que más tarde aumentaría su número hasta 10 mil con la intención de invadir Chihuahua, capturar a Villa, vivo o muerto, y destruir sus tropas. Sin embargo, la maniobra fue un desastre militar y político para los Estados Unidos: no pudieron capturar a Villa, sus fuerzas no fueron destruidas y la sociedad mexicana respondió de manera hostil al ataque. Abandonaron el país 11 meses después de haber iniciado su intervención. Los mismos especialistas exponen que la razón por la que Villa decidió invadir Columbus fue la mera creencia de que existía un pacto entre el gobierno del país del norte y el constitucionalismo liderado por Venustiano Carranza, en el que México podría perder su soberanía y quedar reducido a un protectorado estadunidense. Villa, dolido aún por las batallas libradas contra el Ejército Constitucionalista, que prácticamente destruyeron a la División del Norte, y temeroso de los movimientos de sus contrarios, decidió llevar a cabo un “acto de provocación que causara una guerra para salvar a la patria”. A pesar de que este episodio no resultó como se esperaba para ninguna de las partes involucradas, sin duda fomentó el sentimiento nacionalista y hubo quienes lo consideraron un acto de justicia frente a la invasión estadunidense de 1847. La mayoría de los documentos que se reúnen en esta colección, provenientes del fondo Manuscritos del Primer Jefe del Ejército Constitucionalista del Centro de Estudios de Historia de México, Carso, nos muestran las reacciones del bando carrancista ante el ataque, por lo que es común encontrar expresiones de reprobación ante los hechos.