Clausura del Tribunal de la Santa Inquisición
10 de junio de 1820
El 10 de junio de 1820, después de casi tres siglos de existencia, se clausuró el Tribunal del Santo Oficio, también conocido como Tribunal de la Fe o Santa Inquisición, el cual fue instituido oficialmente en la Nueva España el 4 de noviembre de 1571. Esto se logró gracias a las sesiones de las Cortes de Cádiz realizadas entre 1812 y 1813.
El decreto dado por éstas el 22 de febrero de 1813 se hizo extensivo a los territorios en América, lo cual se consideró como una manera de lograr simpatías y descontrolar a los grupos insurgentes que peleaban en el sur al mando del cura José María Morelos. Pero con la vuelta del absolutismo a España en 1815, el desconocimiento por parte de Felipe VII de las Cortes y la Constitución de Cádiz, regresó también el tribunal, que fue restablecido tanto en Europa como en las colonias americanas. En la Nueva España se dejaron de perseguir los delitos contra la fe, sólo para hostigar y juzgar a las personas por causas políticas, generalmente por su participación en el movimiento independentista. Por cinco años más se padecieron las injusticias de esta temida institución. En 1820, en la Península se adoptó de vuelta el liberalismo constitucional. El día 10 de junio los regidores juraron la Carta Magna y, al hacerlo, ratificaron la supresión acordada por ellos tiempo antes. Por eso se considera este día como el último de la Inquisición novohispana. En la colección que presentamos para recordar esta fecha mostramos documentos emitidos hacia el final de la vida de este organismo, así como obras en las que se discute la validez de su disolución.