Ilustraciones en el Fondo mapilu
El Fondo Mapas, Planos e Ilustraciones del Archivo General de la Nación (agn) cuenta con un rico acervo visual que comprende imágenes creadas entre los siglos xvi y xix. Las ilustraciones que contiene esta colección son representaciones cuya función fue registrar gráficamente ideas, figuras sacras o elementos de identidad nacional de manera simbólica. Resulta interesante cómo la mayoría de ellas fueron realizadas por arquitectos, ingenieros o militares e incluso peritos agrimensores y no necesariamente por artistas plásticos como podría suponerse.
Además de la función de las imágenes como acompañamiento de un texto, cabe considerar otro de sus usos más generalizado en la época señalada y que tiene que ver con el elevado nivel de analfabetismo como un factor determinante a considerar. Por ello, el uso de la imagen, que es universal, hacía comprensible aquello que se deseaba transmitir y en consecuencia es una constante el poco uso de la palabra escrita, salvo cuando se le acompañaba con algún lema, o definitivamente se prescinde de ésta. Ejemplo de ello son las representaciones de los escudos, las banderas, las imágenes religiosas o la monedas, ya que otorgan identidad no sólo a una nación, una ciudad o un linaje, sino a toda una idea porque justo ilustran, dan luz por su definición etimológica, sobre un tema específico. Así pues, el uso simbólico de las imágenes también es una fuente maravillosa de información.
Citemos el caso de los escudos que refieren de manera gráfica a figuras emblemáticas también conocidas como blasones, que transmiten la idea de nobleza y jerarquía. Un ejemplo típico, en los de origen español, es la presencia de la Corona; esta particularidad, como era natural, se extendió en las ilustraciones de la Nueva España, siendo uno de los más antiguos el Escudo en portada de libro de acuerdos de la Real Audiencia, que data de 1664. Otro elemento propio en la heráldica es la representación de la fuerza y el poderío a través del uso de animales como el león o el águila, por ejemplo, tal como se observa en el Escudo de Armas del Imperio Mexicano de 1863. Sin dejar de lado la incorporación de objetos relativos al tema bélico como armaduras, espadas y demás utensilios para hacer la guerra. Finalmente, consideramos también el uso de los colores que con facilidad se asocian a las naciones cuando se plasman en las banderas que los representan.