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SALA 4



La Carrera de la Muerte



Las carreras de automóviles siempre han traído consigo un latente peligro de muerte. Tristemente, a lo largo de su historia, corredores e incluso espectadores han encontrado el fin de sus vidas en una carrera. La Carrera Panamericana no fue la excepción. A lo largo de sus primeras ediciones entre 1950 y 1954, el evento sumó 27 víctimas mortales, 16 de las cuales fueron espectadores. El trauma de la muerte caló aún más hondo a partir de la crónica que los medios de comunicación hicieron de los fatídicos sucesos.

De forma particular, dos pérdidas marcaron la historia de la competencia panamericana: la de José “el Che” Estrada Menocal y la de Felice Bonetto. Ambos eran figuras consagradas del automovilismo mexicano e italiano, respectivamente, que vieron truncadas sus carreras en los indóciles caminos mexicanos.



4.1 José “el Che” Estrada Menocal



José “el Che” Estrada Menocal fue una de las víctimas más sentidas de la Carrera Panamericana. Consolidado piloto mexicano y considerado una de las mejores cartas nacionales ante las estrellas europeas y estadunidenses, “el Che” entró en la I Carrera Panamericana armado con un Packard, aunque no pudo finalizar la competencia. En 1951 volvió a intentarlo, pero sus esperanzas, y las de toda la afición mexicana, fueron truncadas por la curva “La Pera”, en el tramo con dirección a la ciudad de Oaxaca. Mientras negociaba la curva, se ponchó uno de sus neumáticos, enviándolo al fondo de una barranca, donde falleció junto a su copiloto. Posteriormente, en la misma competencia, fallecería el empresario italomexicano Carlos Panini; ambos hechos desencadenaron una serie de condenas públicas a la Carrera Panamericana, que se había convertido en una “carnicería sin sentido”.

Casasola / INAH, José Estrada Menocal con corredores de autos, ca. 1913.

Casasola / INAH,
José Estrada Menocal con corredores de autos, ca.
1913.

Casasola / INAH, Agustín Casaux acompañado por Menocal (Che) y hombres,
                                1913.

Casasola / INAH,
Agustín Casaux acompañado por Menocal (Che) y hombres,
1913.

Casasola / INAH,
Menocal a bordo de un automóvil en el autódromo La Condesa, ca.
1925.

Casasola / INAH,
José Estrada Menocal, corredor de autos y su copiloto, a bordo de un auto, ca.
1930.

José Alfredo Hernández Padilla,
Así fue... La Carrera Panamericana 1950-1954.
Multilibros, 2014, p. 38.

4.1 José “el Che” Estrada Menocal



Casasola / INAH, José Estrada Menocal con corredores de autos, ca. 1913.

Casasola / INAH,
José Estrada Menocal con corredores de autos, ca.
1913.

Casasola / INAH, Agustín Casaux acompañado por Menocal (Che) y hombres,
           1913.

Casasola / INAH,
Agustín Casaux acompañado por Menocal (Che) y hombres,
1913.

José “el Che” Estrada Menocal fue una de las víctimas más sentidas de la Carrera Panamericana. Consolidado piloto mexicano y considerado una de las mejores cartas nacionales ante las estrellas europeas y estadunidenses, “el Che” entró en la I Carrera Panamericana armado con un Packard, aunque no pudo finalizar la competencia. En 1951 volvió a intentarlo, pero sus esperanzas, y las de toda la afición mexicana, fueron truncadas por la curva “La Pera”, en el tramo con dirección a la ciudad de Oaxaca. Mientras negociaba la curva, se ponchó uno de sus neumáticos, enviándolo al fondo de una barranca, donde falleció junto a su copiloto. Posteriormente, en la misma competencia, fallecería el empresario italomexicano Carlos Panini; ambos hechos desencadenaron una serie de condenas públicas a la Carrera Panamericana, que se había convertido en una “carnicería sin sentido”.

Casasola / INAH,
Menocal a bordo de un automóvil en el autódromo La Condesa, ca.
1925.

Casasola / INAH,
José Estrada Menocal, corredor de autos y su copiloto, a bordo de un auto, ca.
1930.

José Alfredo Hernández Padilla,
Así fue... La Carrera Panamericana 1950-1954.
Multilibros, 2014, p. 38.





4.2 Felice Bonetto



José Alfredo Hernández Padilla, Así fue... La Carrera Panamericana 1950-1954, Multilibros, 2014, p. 46.

José Alfredo Hernández Padilla,
Así fue... La Carrera Panamericana 1950-1954,
Multilibros, 2014, p. 46.

José Alfredo Hernández Padilla, Así fue... La Carrera Panamericana 1950-1954, Multilibros, 2014, p. 44.

José Alfredo Hernández Padilla,
Así fue... La Carrera Panamericana 1950-1954,
Multilibros, 2014, p. 44.

Felice Bonetto fue un entusiasta participante de la Carrera Panamericana desde su primera edición. De origen italiano y conocido como “El Pirata”, a partir de 1951 se integró al equipo oficial del fabricante de automóviles Lancia, y junto a sus connacionales Giovanni Bracco, Eugenio Castellotti, Umberto Maglioli y el múltiple campeón argentino Juan Manuel Fangio intentó ganar la Panamericana. El equipo lo logró en 1953 gracias al sudamericano, pero Bonetto perdió la vida en la entrada a la ciudad de Silao, mientras perseguía a sus compañeros de escuadra. La tragedia hermanó al automovilismo mexicano e italiano, pero también continuó avivando a los grupos que estaban en contra de la competencia.

“Los italianos confían en la victoria”,
Esto,
7 de noviembre de 1953, p. 11.

“Los esperanzados...”,
Esto,
9 de mayo de 1950, p. 12.

“Aquí y allá”,
Esto,
8 de mayo de 1950, p. 3.

Felice Bonetto fue un entusiasta participante de la Carrera Panamericana desde su primera edición. De origen italiano y conocido como “El Pirata”, a partir de 1951 se integró al equipo oficial del fabricante de automóviles Lancia, y junto a sus connacionales Giovanni Bracco, Eugenio Castellotti, Umberto Maglioli y el múltiple campeón argentino Juan Manuel Fangio intentó ganar la Panamericana. El equipo lo logró en 1953 gracias al sudamericano, pero Bonetto perdió la vida en la entrada a la ciudad de Silao, mientras perseguía a sus compañeros de escuadra. La tragedia hermanó al automovilismo mexicano e italiano, pero también continuó avivando a los grupos que estaban en contra de la competencia.