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Transformaciones políticas
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En la matanza de Huitzilac fallecen Francisco R. Serrano y otros militares y civiles

3 de octubre de 1927

A finales de los años veinte las pugnas por el poder todavía eran cosa común en México. Aunque los asuntos políticos parecían marchar por la vía institucional, la violencia heredada del conflicto armado todavía se dejaba sentir tras bambalinas. Éste es el caso del evento que recordamos en esta entrada, conocido como la matanza de Huitzilac, en la que perdieron la vida 14 personas entre militares y civiles, amigos y colaboradores del general Francisco R. Serrano, quien tuvo la mala idea de contender por la presidencia de la República contra Álvaro Obregón.

El general Serrano, originario de Santa Ana, Sinaloa, nació en agosto de 1889, y fue a partir de los 18 años que comenzó a involucrarse de manera más activa en la política del estado de Sonora, lugar en donde radicaba desde los cinco años. Fue secretario particular de José María Maytorena, gobernador de esa entidad a principios de 1913, pero dejó su cargo para cooperar con el derrocamiento de Victoriano Huerta, por lo que fue uno de los primeros ciudadanos en ingresar en las filas del Ejército Constitucionalista. Después estuvo bajo las órdenes de Álvaro Obregón y ocupó diversos cargos como militar, y fue diputado federal y gobernador del Distrito Federal, además de desempeñarse como secretario de Guerra y Marina durante su gobierno en 1922. Para 1927 era uno de los generales más experimentados y gran conocedor del funcionamiento del ejército y tanto sus méritos como sus relaciones lo hacían un buen candidato a la presidencia de la República. 

Cuando los rumores de la reelección de Obregón comenzaron a circular, Serrano manifestó no estar de acuerdo con modificar la Constitución para que su amigo accediera nuevamente a la presidencia y se lo hizo saber. Por ello, él y sus compañeros fueron detenidos y acusados de organizar una rebelión. La comitiva que los aprehendió se detuvo en las inmediaciones del pueblo de Huitzilac y los soldados los fusilaron. En el kilómetro 48 de la carretera federal que va de la Ciudad de México a Cuernavaca están clavadas 14 cruces que señalan el lugar donde se cometieron los asesinatos. En esta colección reunimos documentación emitida por Serrano en sus distintos cargos y en su participación en la Revolución mexicana.