Monedas y billetes que construyen un país: El Banco de México
Los sucesos acontecidos durante la Revolución mexicana repercutieron a diferentes niveles en el país, pero fue principalmente la economía la que se vio afectada. Además del conflicto bélico, la inestabilidad provino en gran medida de la ausencia de un único emisor de monedas y billetes. Aunque previamente, en 1822, ya se había intentado concretar la idea de una institución que fungiera como tal, ésta fracasó. Lo anterior resultó en la libre emisión de la moneda por distintos bancos, situación que predominó hasta el fin del movimiento armado.
Fue dentro de la Constitución de 1917 en la que se establecieron las características idóneas que se buscaban para la emisión de la moneda. Ésta tendría que ser realizada por una institución bancaria única, central y regulada por el gobierno. A pesar de ello, pasaron varios años antes de que esta iniciativa se pudiera concretar y tras superar distintas adversidades, principalmente las de tipo presupuestal, en el año de 1925 se fundó el Banco de México, siendo sus principales funciones la regulación de la circulación monetaria, de las tasas de interés y del tipo de cambio.
La colección que se presenta a continuación muestra los billetes que se produjeron durante la Revolución mexicana, llamados bilimbiques, que como se señaló eran emitidos por diferentes bancos del país, es por ello que se observa dinero de diferentes estados, como Nuevo León, Puebla y Chihuahua; de este último hay un ejemplar en el que en el extremo izquierdo se ve plasmada la cara de Madero, y en el derecho el rostro de Abraham González. Otro de los recursos que se contemplan es una de las propuestas anteriores a la creación del Banco de México, pues data de 1857, durante el mandato del presidente Ignacio Comonfort.