Rivera y Siqueiros: pintura de caballete
Cuando escuchamos o leemos los nombres de Diego Rivera (1886-1957) o de David Alfaro Siqueiros (1896-1974) a menudo evocamos desde nuestra memoria visual los grandes murales en los que plasmaron como artistas socialmente comprometidos el espíritu posrevolucionario de nuestro país. Es menos conocida su obra catalogada como pintura de caballete. Al tratarse de trabajos más pequeños suelen ser de temática distinta a la de sus creaciones muralísticas, en las que pudieron enfatizar diversos detalles por la amplitud del espacio. En cambio, en su pintura de caballete abordan otros géneros como el del retrato.
En esta selección podemos observar cómo cada uno de ellos conservó características de su estilo. Siqueiros, incluso en el pequeño formato, busca plasmar la apariencia del movimiento y al igual que en sus murales juega con las proporciones, tanto del cuerpo humano como de espacios arquitectónicos. Por su lado, Rivera conserva la perfecta definición de la figura, así como la solidez de los colores, con una técnica impecable y meticulosa que fue perfeccionando a lo largo de toda su carrera.
