Desigualdad e infancias afrodescendientes
La Comisión Económica para América Latina (cepal) fue establecida en 1948 por el Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas y tiene el propósito de fomentar el desarrollo económico en América Latina y fortalecer las relaciones regionales e internacionales en esta materia. Desde ese año cambió su nombre a Comisión Económica para América Latina y el Caribe. Hoy en día es una de las cinco comisiones regionales de la onu; su sede está en Santiago de Chile.
Según la cepal, en 2015 la población afrodescendiente en América Latina ascendía a 130 millones de personas, representando 21.1% de la población total. Sin embargo, el reconocimiento de las localidades afrodescendientes es un aspecto que aún sigue siendo visibilizado. Aunque desde inicios del siglo xx se vienen generando esfuerzos para identificar y formar políticas que coadyuven en la desigualdad por condición étnico racial el avance de éstos ha sido lento. Por otra parte, la cepal ha expuesto que dentro de la sociedad existen grupos en situación de vulnerabilidad y algunos de ellos son: niños, niñas y adolescentes; las personas mayores; las mujeres; los pueblos indígenas; la población afrodescendiente; las personas con discapacidad; y los migrantes, entre otros. Las infancias y juventudes afrodescendientes sufren desigualdad y discriminación por diversos factores, entre ellos su condición étnico racial y la vulnerabilidad derivada de su edad, por lo que garantizar y resguardar los derechos de niños, niñas y adolescentes afrodescendientes es fundamental. Una de las políticas que coadyuvan a lograrlo es el derecho a la educación ya que impulsa su desarrollo integral.