Esa es la clase de correspondencias que explica la demografía. Una definición elemental arrojaría que la demografía (del griego δήμος dēmos 'pueblo' y γραφία grafía 'trazo, descripción', estudio de la población) es la ciencia que estudia estadísticamente las poblaciones humanas; su dimensión, estructura, evolución y características generales, así como los procesos concretos que determinan su formación, conservación y desaparición.

Aproximadamente hace un siglo, la sociedad comenzó a abandonar el ámbito rural para construir una mayoría urbana en consecuencia la actividad económica se concentró en el sector servicios y la industria. Casi desapareció el analfabetismo y 90% de la población está cubierta por los servicios de salud. Por desgracia, no se ha considerado a ésta y a los individuos que la conforman, como el principal actor y beneficiario de todas las acciones del Estado, sino sólo como un dato exógeno al proceso de desarrollo. Es decir, no es la gente sino el país en abstracto lo que ha privado como directiva de crecimiento en estos más de 100 años. Entre 2018 y 2023 emigraron 1.2 millones de mexicanos, el éxodo y los patrones migratorios dentro del país son igualmente reveladores. La migración se dirige a los lugares más prósperos, mientras que las entidades más pobres expulsan población. En el futuro cercano está que seamos un país mucho más densificado en las ciudades, con mayores desigualdades en el ingreso y la distribución de la riqueza, además de volvernos una población envejecida. Las diversas modalidades de desarrollo seguidas por los diferentes gobiernos han tenido efectos diferenciales en distintos sectores de la población. Estudiar la demografía de México es estudiar la historia de sus regímenes e injusticias.