Escuelas: espacios de aprendizaje y socialización
A principios de 2020 inició la pandemia de sars-cov-2. Todas las actividades cotidianas como trabajar y estudiar, e incluso las recreativas fueron modificadas. Las escuelas, que son un lugar de aprendizaje y socialización, fueron transformadas en un sitio digital a través de una pantalla. ¿Qué pasó con aquellos edificios escolares que cumplen con una de las funciones básicas de niños y jóvenes? Muchos de estos espacios fueron construidos a lo largo del siglo xx, inspirados en nuevas corrientes arquitectónicas y educativas.
Así como la Universidad Nacional Autónoma de México (unam) fue provista de una Ciudad Universitaria al sur de la capital del país en la década de 1950, arquitectos e ingenieros experimentaron propuestas constructivas que ofrecieran a profesores y alumnos un espacio adecuado para estudiar. Sin embargo, entre 2020 y 2022 estos edificios fueron abandonados temporalmente y la escuela se trasladó al hogar, lo que representó un reto en todos los aspectos.
A casi dos años de regresar a las actividades cotidianas con cierta normalidad, la pandemia demostró los límites y posibilidades de llevar la educación a lugares remotos y con realidades distintas a la urbana, así como el aprovechar los recursos naturales con mayor eficiencia: instalación de paneles solares, sistemas de captación de agua, conectividad al internet. En este sentido, el proyecto educativo nacional dio paso a la llamada Nueva Escuela Mexicana, que pretende aprovechar al máximo la infraestructura existente, pero también el capital humano de las comunidades para adecuar los edificios escolares a las necesidades del siglo xxi.
