Sociedad organizada
Memórica en este mes de septiembre propone revisar un tema que tiene su propia historia y su memoria latente: la sociedad organizada. Uno de los autores más comprometidos con la observación de esta formación civilizatoria, Carlos Monsiváis, en su libro Entrada libre, crónicas de la sociedad que se organiza, da cuenta de los sucesos más importantes que marcaron los últimos decenios del siglo XX y que construyeron la sociedad contemporánea en México: la marginalidad social, el sismo de 1985, la terrible tragedia de San Juanico, la disidencia magisterial y los movimientos popular-urbano y estudiantil universitario.
Durante aquel terremoto, los ciudadanos se organizaron en las calles, en los lugares de ayuda voluntaria y de socorro de manera espontánea y con una gran muestra de solidaridad y de espíritu comunitario, y de acuerdo con este autor, este hecho “Exige la rápida memorización de un vocabulario técnico (lo relativo al salvamento y a la construcción), y de un vocabulario teórico, al principio centrado en la expresión sociedad civil”.
La definición de sociedad civil la establece el carácter de un pueblo que ha vivido muchas adversidades y ausencias gubernamentales. Entereza, organización y autogestión, esta agrupación tiene muy diversas tesituras de las que la poesía urbana canta sus glorias en la respuesta inmediata a una catástrofe natural, nace de los desastres y de las necesidades primarias de contención y cuidado, y donde cientos de desconocidos dan su vida por los que más lo requieren. “Cada comunidad, si quiere serlo, construye sobre la marcha sus propias definiciones”, afirma Monsiváis, y así, este conglomerado es organización, demanda social, ayuda solidaria, afirmación en el trabajo colectivo, ejercicio de las libertades democráticas y carácter profundo de un país con memoria.
En esta colección pueden consultarse testimonios, fotografías, artículos y documentos relativos directa e indirectamente a la construcción de este cuerpo social, tan antiguo y tan actual: la Cartilla social o breve instrucción sobre los derechos y obligaciones del hombre y la sociedad civil para el uso de la juventud mexicana publicada en 1836, la formación de sociedades de ayuda mutua, escenas de desastres en donde ha intervenido la población haciendo frente a inundaciones, terremotos y accidentes o donde lucha y protesta por sus derechos, participa y se educa en sus asambleas, en sus liderazgos y en sus pronunciamientos colectivos, entre otros objetos.
Para una revisión conmemorativa, Memórica también propone consultar el número 36 de la revista Luna Córnea dedicada a la obra del fotoperiodista Marco Antonio Cruz, quien reportó las largas horas de salvamento y socorro a las víctimas del sismo de 1985 y registró a los primeros grupos que dieron forma a la organización popular urbana por la vivienda y los efectos en los movimientos estudiantiles de finales de los años ochenta de una sociedad que se organiza.