Se estima que la capital mexica se fundó alrededor del año 1325 y fue la ciudad más poderosa de Mesoamérica, ya que durante casi dos siglos esta urbe fue el centro del poder al tener supeditadas a la mayoría de las sociedades mesoamericanas. Fue el Altiplano el área donde se establecieron los mexicas, específicamente en la cuenca de México. Ésta es endorreica, ya que el agua que se acumula al interior no tiene una salida hacia el mar, y con el paso del tiempo este almacenamiento forma un sistema de lagos.

Tenochtitlán se construyó sobre islotes y a medida en la que la ciudad fue creciendo el espacio entre éstos se fue rellenando. Al estar asentada en un lago salobre el consumo de agua potable para la población y la agricultura supusieron un reto. El primer caso lo resolvieron creando acueductos que transportaban el líquido desde los manantiales de Chapultepec hasta el centro de la ciudad. Mientras que para el segundo caso se construyó un albarradón para separar el agua de los lagos de México y de Texcoco, de esta manera la parte más profunda y salada quedaría del lado de este último lo que permitió que se pudieran hacer cultivos en las chinampas. México-Tenochtitlan fue una ciudad compleja que creció a lo largo de casi dos siglos, contó con cuatro barrios de asentamientos poblacionales y un espacio dedicado a los recintos ceremoniales, donde se encuentra la estructura más reconocida: el Templo Mayor.