Carlos Monsiváis Aceves reclamó siempre, como premisa básica de todo argumento, la voz diversa y la defensa del más débil. Activista político, crítico de cine y de arte, literato y vocero de una opinión pública más interesada en el debate que en demostrarse mayoría, Monsiváis, muy acorde con su personalidad, voraz por el conocimiento y desordenada con su gerencia, estudió en las facultades de Economía y de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México, teología en el Seminario Teológico Presbiteriano de México y asistió al Centro de Estudios Internacionales de la Universidad de Harvard, sin obtener ninguno de tales títulos. No obstante, el empuje y promoción que otros requerían es algo que hizo muy bien siempre.

Dirigió la colección de discos Voz Viva de México, así como el suplemento La Cultura en México de la revista Siempre! (entre 1972 y 1987), donde publicó, firmando como "R", la sección "Por mi madre, bohemios", que, luego de una pausa, coincidente con el álgido año político del 88, publicaría en el periódico La Jornada (1999-2001), y de 2006 a 2010 escribió para el semanario Proceso.

Recibió reconocimientos incontables, entre los que destacan el Premio Nacional de Periodismo en dos ocasiones (1977 y 2009), el Premio Mazatlán de Literatura (1989), el Premio Xavier Villaurrutia (1995), el Premio Lya Kostakowsky, el Premio Anagrama de Ensayo (2000) y el Premio de Literatura Latinoamericana y del Caribe Juan Rulfo (2006). Monsiváis es una figura esencial para entender la lucha y los logros que amplían el espectro de libertades individuales, como la despenalización del aborto, los derechos de los animales, la protección de poblaciones marginadas y la diversidad sexual y su ejercicio.