Fundación de la Confederación de Trabajadores de México
21 a 24 de febrero de 1936
Entre el 21 y el 24 de febrero de 1936 se llevó a cabo una máxima reunión sindical conocida como Congreso de Unificación Proletaria. Según la historiadora Daniela Spenser, este encuentro “fue un foro único de intercambio de experiencias positivas y negativas de los sindicalistas de gran parte del país”, organizado como respuesta a las declaraciones que Plutarco Elías Calles emitió desde el exilio en el año 1935 referentes a la política gubernamental, según él, tolerante a las huelgas.
De las discusiones que se llevaron a cabo en esta asamblea nació la Confederación de Trabajadores de México (ctm). Esta nueva organización congregó a alrededor de 200 mil trabajadores de las más variadas corrientes políticas: socialistas, comunistas y anarquistas, entre otras, y a los líderes e intelectuales que encabezaban cada una, debido a lo cual, los especialistas consideran que nació fragmentada pues cada uno de estos distintos grupos buscaba la supremacía sobre los otros, lo que minó las posibilidades de colaboración y entendimiento. La lucha entre los miembros de la ctm no sólo era ideológica, sino por posiciones políticas y privilegios, que incluían cargos como presidencias municipales, diputaciones y senadurías, e incluso, gubernaturas. Aunque en sus estatutos fundacionales se presentó como una organización al servicio del proletariado mexicano, que luchaba contra la estructura semifeudal del país, contra la intervención extranjera y en favor de la independencia económica de la nación, este órgano, que en un principio se pensó que defendería los intereses y derechos de los trabajadores, con el tiempo se convirtió en un mecanismo de control social para el sistema político mexicano. Para recordar este acontecimiento elegimos algunos documentos, notas periodísticas e imágenes relativas a esta central obrera.