Una de las zonas arqueológicas más conocidas por los mexicanos es la de Monte Albán. La ciudad que antaño ocupó lo que ahora sólo vemos como vestigios, se fundó en el año 500 a.C. y fue la capital del imperio zapoteca hasta aproximadamente el 800 d.C. Se presume que las causas de su abandono fueron conflictos políticos, sin embargo, el lugar continuó visitándose como sitio de culto después de esas fechas. En su periodo de mayor esplendor, Monte Albán fue admirada por su traza urbana, por lo destacado de su arquitectura, sus monumentos y porque llegó a ser habitada por 35 mil personas. De esta manera, el conjunto de sus edificios, representaciones escultóricas y los innumerables objetos de diferentes clases obtenidos durante las distintas exploraciones que se llevaron a cabo en el siglo xx, la convierten en un lugar destacado y valioso no sólo para los mexicanos sino para todo el mundo, pues es muestra de la creatividad humana, de su desarrollo cultural, además de ser testimonio de la maestría con la que aquellos antiguos habitantes construyeron diques, canales, pirámides y montículos sobre la propia montaña. Para recordar esta fecha presentamos una serie de imágenes y materiales relacionados con esta zona arqueológica.