Tres generaciones de grandes pintores: los Baltasar de Echave
Baltasar de Echave es el nombre propio de tres grandes pintores del virreinato, abuelo, hijo y nieto, a quienes además del apellido los identifica su propio estilo y su temporalidad. Baltasar de Echave Orio “el Viejo” (1548-1623) es el único de los tres que nació en España, específicamente en Zumaya, Guipúzcoa, y se estableció en la Nueva España aproximadamente en 1582. Su obra, como gran parte de la pintura colonial, se centró en el tema religioso, apegado al estilo italiano de finales del Alto Renacimiento, en el que el equilibrio y la armonía de las formas se va perdiendo y la representación de la figura humana se aleja del naturalismo para hacerse menos idealizada, tal como se muestra en la selección que aquí presentamos.
Su hijo Baltasar de Echave Ibía (1583-1584?-1644), “el Mozo”, sigue el camino de su padre y se dedica a la pintura sacra, pero con un estilo propio y francamente distanciado del de su progenitor; lo primero que salta a la vista es el uso constante del color azul, lo cual le brinda a su obra un carácter cálido, menos artificial. Por último, el nieto del primer Baltasar, Baltasar de Echave y Rioja (1632-1682), tomó las primeras lecciones de su padre para luego formarse en la tierra de sus ancestros en el País Vasco, y de vuelta en el Nuevo Mundo trabajó por encargo de varias congregaciones religiosas. En este espacio mostramos tres obras suyas que afirman la evolución de la pintura virreinal en tres generaciones de una misma familia de artistas. ¿Puedes ver las diferencias?