El 9 de enero de 1937 Lev Davidovich Bronstein, mejor conocido como León Trotsky, llegó a México como refugiado político. Después de diversas experiencias de persecuciones y exilios, arribó a nuestro país por el Golfo de México, gracias al otorgamiento de asilo por parte del gobierno de Lázaro Cárdenas en 1936, a solicitud del muralista Diego Rivera.

León Trotsky fue un importante ideólogo socialista. Desde joven se involucró en actividades políticas y fue uno de los organizadores de la Revolución rusa de 1917. En 1929 escribió el influyente libro La revolución permanente, en donde expresó su convicción de que el socialismo debía regirse por la dirección política del proletariado. Uno de sus más importantes legados fue erigir la bandera del internacionalismo, que postuló la expansión de la revolución socialista a nivel mundial.

Sus desavenencias personales con Lenin (Vladímir Ilich Uliánov) y posteriormente la abierta oposición al estalinismo, le llevaron a formular un pensamiento crítico y a liderar el movimiento internacional de la izquierda revolucionaria. Por su actividad política desde muy joven había sufrido encarcelamientos y exilios; fue expulsado del Partido Comunista de la Unión Soviética en 1927 y se vio obligado a huir hacia Turquía en 1929. Después de una estancia en Francia y Noruega fue arrestado en 1936, año en que el presidente Cárdenas le otorgó el asilo político.

En el Archivo Histórico de la Ciudad de México (ahcm)resguardamos documentos excepcionales acerca de la estancia de Trotsky en México. Se trata de un expediente del Fondo Departamento del Distrito Federal, sección Jefatura de Policía, subsección Policía secreta, el cual contiene 479 fojas correspondientes a los informes presentados por los agentes encargados de seguir y vigilar al comunista ruso.

Durante su estadía en México, Trotsky continuó su actividad política y en 1937 redactó el libro Los crímenes de Stalin. También colaboró con una comisión investigadora formada en Estados Unidos para develar los crímenes contra opositores al estalinismo. Además, se empeñó en revelar la actividad de la policía secreta rusa en el extranjero y trabajó en consolidar la organización de la Cuarta Internacional, que se formalizó en 1938.

El acecho constante hacia el revolucionario ruso se ha develado profusamente en diversas investigaciones históricas. El expediente que conservamos en este archivo es una muestra del seguimiento y protección que brindaron las autoridades mexicanas. Contiene telegramas que informan de sus actividades políticas, la participación de diversos personajes que también fueron vigilados por su posible relación con Trotsky, así como sendos interrogatorios a personas sospechosas o relacionadas con los asaltos y atentados perpetrados en su contra.

Integra notificaciones, telegramas e informes elaborados por los agentes de la policía secreta en el seguimiento a Trotsky y una gran parte del expediente se ocupa de la investigación por el atentado ocurrido la madrugada del 24 de mayo de 1940 en su casa ubicada en Coyoacán; así como su asesinato tres meses después. Además, contiene fotografías de la escena del crimen.