Institución: Fonoteca Nacional-Mexicana
Jaguar (panthera onca) es uno de los mamíferos más poderosos de México, carismáticos, y ha sido venerado por los pueblos mesoamericanos cuando su población se extendía por gran parte de la región que hoy es México y Centroamérica. El jaguar es uno de los grandes felinos que existen en territorio mexicano y que se distribuye hasta Sudamérica. En el pasado, los pueblos mesoamericanos lo consideraron un animal sagrado que representaba la dualidad del día y la noche por su hermoso pelaje dorado y manchas obscuras a manera de lunares, pero también por los hábitos crepusculares y nocturnos de tan maravilloso animal. Los mexicas incluso tenían entre su jerarquía militar a los guerreros jaguar que destacaban por su habilidad y fiereza como se ha plasmado en las crónicas españolas del siglo xvi y en el muralismo mexicano de principios del siglo xx. En el pasado, la distribución del jaguar era más grande de lo que es hoy en día.
El jaguar comparte su hábitat con otros felinos americanos como el puma (puma concolor), ocelote (leopardus pardalis), y otras especies herbívoras y carnívoras, que se distribuían desde el actual oeste de Estados Unidos hasta la Patagonia en Argentina, de ahí que los pueblos indígenas del continente veneraran a tan majestuoso animal. Sin embargo, la llegada de los europeos en el siglo xvi cambió la relación de este majestuoso felino con los humanos. La introducción de ganado, tala y quema de las selvas, apertura de caminos, cacería furtiva, entre otras actividades que, aún hoy continúan, han recluido al jaguar a reservas de la biosfera como la de Calakmul (Campeche), Sian Ka’n (Quintana Roo) y Petén, (Guatemala). Si bien, estos espacios permiten la conservación y estudio de los animales, también confirman el impacto que la humanidad ha tenido en ellos. Sirve el presente destacado para dar a concer la narración sobre el jaguar y que forma parte de la colección Sonidos en peligro de extinción.
Si bien el establecimiento de áreas naturales protegidas donde el jaguar y otras especies pueden convivir y desarrollar su ciclo natural, el tráfico de especies exóticas, pieles, invasiones de tierra, entre otros problemas, han afectado la relación e interacción entre estos felinos y la especie humana. Así, conforme algunas comunidades se establecen en los límites del habitan del jaguar, la introducción de animales domésticos como cerdos, vacas, perros y gatos, transmiten enfermedades, como la sarna, rabia u otras a través de pulgas y garrapatas que afectan gravemente a las comunidades se jaguares y otras especies como el ocelote (Leopardus pardalis). Además, la presencia de animales domésticos facilita a los grandes felinos la captura de estas especies, lo que provoca fricciones con las comunidades que ven afectada el soporte económico de sus familias, induciéndolos a cazar a estos animales. Encontrar un equilibrio entre los animales y el desarrollo humano es uno de los grandes retos del siglo xxi.
Material de apoyo:
Ceballos, Gerardo, Cuauhtémoc Chávez, Heliot Zarza, Carlos Manterola, “Ecología y conservación en la región de Calakmul”, Bio Diversitas. Boletín bimestral de la Comisión Nacional para el Conocimiento de la Biodiversidad (conabio), México, septiembre 2005, núm. 62, pp. 2-7.
Romeu, Emma, “El jaguar”, en Bio Diversitas. Boletín bimestral de la Comisión Nacional para el Conocimiento de la Biodiversidad (conabio), México, junio 1996, año 2, núm. 7, pp. 2-5.