Luis González y González en su obra El oficio de historiar señala que “Los hombres de todas las épocas han tendido a repartirse en numerosos reinos separados y cambiantes, en territorios de muy diversas dimensiones”. De acuerdo con lo enunciado por el historiador mexicano, todo acontece en un espacio determinado y en testimonios, vestigios y huellas podemos notar la geopolítica o la geografía en la que se desarrollaron los hechos. Esta exposición se ocupa en construir una especie de hoja de ruta de una serie documental seleccionada del acervo de un destacado hombre de letras cuya trayectoria podemos situar entre finales del siglo xix y la primera mitad del xx. Algunas de las piezas han viajado cientos de kilómetros superando ya un siglo de existencia y de no ser por los trabajos de conservación, catalogación y resguardo del Archivo Histórico del Municipio de Colima (ahmc) poco podríamos saber de ellas.
Esta muestra se creó con motivo del 70 aniversario luctuoso de Balbino Dávalos Ponce. También es un reconocimiento a la labor del ahmc, ya que hace dos décadas la familia del colimense entregó el fondo documental y desde entonces el personal y los estudiosos de Dávalos se han ocupado de su catalogación, digitalización, estudio y difusión del acervo. Balbino Dávalos fue un abogado que incursionó en el mundo de la traducción, la composición poética, la crítica literaria, el periodismo, la docencia y, por si fuera poco, fue funcionario público con una notable carrera diplomática. Esta exposición, más que ahondar en la biografía, destaca ciertos lugares de los que hablan los documentos y se detiene en las distancias que seguramente algunos de ellos recorrieron y que, gracias a su conservación, trazamos algunas de sus posibles trayectorias. El lector podrá conocer datos sobre la vida de este escritor viajero y, en cierto modo, recorrer la ruta —aproximada— del humanista y su acervo.
Luis González y González en su obra El oficio de historiar señala que “Los hombres de todas las épocas han tendido a repartirse en numerosos reinos separados y cambiantes, en territorios de muy diversas dimensiones”. De acuerdo con lo enunciado por el historiador mexicano, todo acontece en un espacio determinado y en testimonios, vestigios y huellas podemos notar la geopolítica o la geografía en la que se desarrollaron los hechos. Esta exposición se ocupa en construir una especie de hoja de ruta de una serie documental seleccionada del acervo de un destacado hombre de letras cuya trayectoria podemos situar entre finales del siglo xix y la primera mitad del xx. Algunas de las piezas han viajado cientos de kilómetros superando ya un siglo de existencia y de no ser por los trabajos de conservación, catalogación y resguardo del Archivo Histórico del Municipio de Colima (ahmc) poco podríamos saber de ellas.
Esta muestra se creó con motivo del 70 aniversario luctuoso de Balbino Dávalos Ponce. También es un reconocimiento a la labor del ahmc, ya que hace dos décadas la familia del colimense entregó el fondo documental y desde entonces el personal y los estudiosos de Dávalos se han ocupado de su catalogación, digitalización, estudio y difusión del acervo. Balbino Dávalos fue un abogado que incursionó en el mundo de la traducción, la composición poética, la crítica literaria, el periodismo, la docencia y, por si fuera poco, fue funcionario público con una notable carrera diplomática. Esta exposición, más que ahondar en la biografía, destaca ciertos lugares de los que hablan los documentos y se detiene en las distancias que seguramente algunos de ellos recorrieron y que, gracias a su conservación, trazamos algunas de sus posibles trayectorias. El lector podrá conocer datos sobre la vida de este escritor viajero y, en cierto modo, recorrer la ruta —aproximada— del humanista y su acervo.
Luego de la muerte de Balbino Dávalos su archivo estuvo resguardado por su familia durante 50 años. Fue hace 20, el 31 de octubre de 2001, que Ivonne Sánchez Dávalos entregó al ahmc el acervo personal de su abuelo. Gracias al acierto de los descendientes en depositar el fondo Dávalos en las instituciones especializadas es que podemos hacer este recorrido documental.
El primer día de diciembre del año de 1902 el periódico El Campeón del
Pueblo publicó una
nota
sobre el arribo del “distinguido viajero” Balbino Dávalos a Colima, su tierra natal. Las
tres
columnas tenían el objetivo de informar de su visita a los habitantes del estado y también
ofrecían un recuento de sus logros en la capital de la república y en otros países
extranjeros
gracias a su trabajo en la sre.
Esta publicación costaba tres centavos y es interesante ver cómo el autor de la nota exalta
la
trayectoria del escritor e incluso lo llama “Magnífico ejemplo”. Si bien es cierto que el
aporte
cultural de Dávalos en ocasiones pasa inadvertido, para sus contemporáneos su talento era
sumamente enriquecedor y muy valioso ya que gracias a sus traducciones era posible leer a
otros
autores. Hasta la fecha, la figura de Dávalos sigue siendo motivo de investigación y orgullo
para los colimenses y esa nota de hace 119 años nos demuestra el reconocimiento que tuvo en
aquella época.
La obra del noruego Carl Lumholtz cuyo título abreviado es El México
desconocido...* fue
publicada en Nueva York por la editorial Charles Scribner’s Sons en 1904, tan sólo dos años
después de que el original en inglés se publicara en la misma casa editorial. Esta magnífica
aportación está profusamente ilustrada y bellamente encuadernada y las más de mil páginas
de
la
primera edición fueron traducidas por Balbino Dávalos.
El libro del que nos ocupamos merecería por sí solo una exposición ya que es fundamental
para la
antropología mexicana, y gracias al trabajo de traducción que Dávalos emprendió, los
lectores
pudieron leer en menos de dos años en español los resultados del viaje que emprendió el
noruego
recuperando información valiosa de coras, huicholes, nahuas, tarahumaras, tepehuanos,
tarascos y
pápagos, entre otras etnias. Cabe destacar que hasta la fecha la traducción de Dávalos se
sigue
reeditando.
* El México desconocido. Cinco años de exploración entre las tribus de la Sierra Madre Occidental; en la Tierra Caliente de Tepic y Jalisco, y entre los tarascos de Michoacán.
“Sus versiones son de tal suerte perfectas y meritorias, que igualan, cuando no superan al
original”, así se refieren a las traducciones del colimense en esta columna que recupera una
especie de antes y después en dos publicaciones de la prensa extranjera, a saber: El
Imparcial y
El Liberal de Madrid. Por una parte, anuncian que se llevará a
cabo una lectura en el
Ateneo de
Madrid e inmediatamente se comenta lo sucedido en la reunión de las 10 de la noche del 22 de
marzo de 1909 en la institución cultural de la capital española. Dávalos compartió
composiciones
propias y otras versiones que realizó al castellano.
Se informa que la velada fue “un verdadero regalo intelectual” y contó con la asistencia de
distinguidas personalidades, las cuales reconocieron su talento con cálidos aplausos. Es así
que
por medio de la prensa tenemos testimonio del reconocimiento nacional e internacional que
tuvo
Dávalos en cuanto a sus aportaciones en el campo de la traducción literaria.
La carta mecanuscrita fue fechada en Chihuahua el 1° de mayo de 1905 y remitida a la Ciudad
de
México. En ésta, Enrique Creel, entonces gobernador del aquel estado del norte, le informó a
Dávalos que aún no recibía la obra de Carl Lumholtz que “hábilmente” tradujo y también
expresó
sus deseos por que la publicación formase parte de su biblioteca personal.
Es interesante destacar la ubicación geográfica entre el emisor y el receptor —poco más de
mil
kilómetros entre uno y otro—, no obstante, gracias a lo escrito en el segundo párrafo,
sabemos
que ambos tenían un vínculo con la Secretaría de Relaciones. En el caso de Balbino Dávalos,
éste
empezó su carrera en dicha dependencia en 1895, y sobre la figura de Creel podemos decir que
durante 1906 y 1907 fue embajador en los Estados Unidos y posteriormente llegó a ser
secretario
de esa institución.
Estas muestras de su comunicación afortunadamente sobrevivieron a los diferentes viajes, y
como
podrá darse cuenta el lector, la breve reflexión sobre la distancia que recorrió este
documento
es apenas una estimación, ya que, de acuerdo con algunos testimonios, Dávalos en la mayoría
de
sus traslados llevaba consigo algunos ejemplares de su archivo y biblioteca personal.
En el fondo Dávalos abundan los testimonios escritos que reunió a lo largo de su vida. Entre
éstos resaltan las abundantes copias de correspondencia así como diversos documentos creados
por
dependencias de gobierno. Este recurso es muestra de ello.
Con el escudo de la sre en el margen superior izquierdo, se
informa a la Secretaría de
Hacienda
que Balbino Dávalos fue nombrado segundo secretario interino de la Embajada de México en los
Estados Unidos. Se da instrucción para que la Tesorería entregue la suma necesaria para el
traslado a Washington del nuevo funcionario. La relación de Dávalos con el país del norte se
prolongará aún más con el tiempo, ya que no sólo se limitó al trabajo de servidor público,
sino
que también se desempeñó como docente. Esta carta es apenas una prueba de las largas
temporadas
que pasó el escritor en el país vecino.
Uno de los detalles sumamente cautivadores de nuestro personaje son los constantes viajes que
realizó al formar parte de la sre. Esta pieza es una copia
mecanuscrita que forma parte del
expediente de su correspondencia oficial de los años de 1910 a 1912. De entre las más de 446
fojas tomamos esta misiva que fue redactada en Lisboa en 1910. Con una delicadeza singular,
Balbino Dávalos da cuenta a la secretaría de cómo fue su presentación ante el príncipe.
Da la sensación de que no podía resistirse al impulso de trasladar al español aquellos
telegramas, cartas, oficios que llegaban a él en otros idiomas y buena parte de estas
comunicaciones oficiales van acompañadas de las traducciones para comodidad de sus
interlocutores. La destreza y habilidad de la escritura del colimense puede apreciarse
perfectamente en esta serie, ya que los escenarios que recreó permiten al lector imaginar
algunos detalles de esos momentos capturados.
Dato curioso:
Entre Lisboa y el ahmc hay una distancia aproximada de
9,460.01 km.
Este manuscrito fue creado tentativamente por el diplomático chileno Marcial Martínez de
Ferrari
en Santiago; lo anterior nos indica que este documento recorrió al menos el trayecto desde
la
ciudad referida hasta la capital de México. Aunque la misiva está firmada simplemente con
“M.
Martínez” es gracias a otra carta de 1904 en la que quien fuera encargado de la Legación de
Chile en México escribió a Dávalos informando detalles sobre su estado de salud y su deseo
de
regresar a la vida diplomática.
Este documento es valioso ya que es la prueba del intercambio entre ambos personajes, lo que
podría interpretarse también como un diálogo entre los dos países latinoamericanos. Viajaban
comentarios sobre la vida personal y académica, también libros, y es que uno de los motivos
de
la misiva es que Martínez agradeció el envío de la traducción de El
México
desconocido...
Dato curioso:
Entre Santiago de Chile y el ahmc hay una distancia
aproximada de 6,935.60 km.
Otra de las particularidades del fondo Dávalos es su variedad lingüística. En esta entrada
nos
centraremos en un recorte del periódico The New York Times;
éste nos permite fijar la
procedencia de algunos documentos y también hacer énfasis en el paso de nuestro personaje
por
aquellos sitios. La columna recupera lo que aconteció en Londres en la ceremonia del Jubileo
de
Diamante en honor al emperador Francisco José I de Austria.
En la conmemoración de los 60 años de reinado participaron más de 300 personas, así como los
diversos representantes de los cuerpos diplomáticos de poco más de 20 naciones, entre ellas
México, representado por Dávalos. Curiosamente, en el recorte conservado se resaltó con
tinta
roja la palabra “Mexican”, esto en un intento de destacar entre la amplia lista de invitados
la
presencia del ministro mexicano en tal evento.
Dato curioso:
Entre Nueva York y el ahmc hay una distancia aproximada de
3,694.01 km.
Este documento forma parte de la correspondencia oficial que reunió durante su vida
profesional
Balbino Dávalos. La pieza fue emitida por Justo Sierra en 1908 desde la Secretaría de
Instrucción Pública y Bellas Artes; tenía por objetivo informar a nuestro personaje, quien
entonces ocupaba el cargo de primer secretario de la Legación de México en Inglaterra, que
Porfirio Díaz lo nombró delegado para el IX Congreso Internacional de Geografía, el cual se
reuniría en Ginebra.
Seis meses después le fue entregada en Londres otra carta de Sierra en la que éste lo
felicita
por su participación en el congreso ya mencionado y acto seguido promete ayudarle a resolver
los
problemas financieros. Las menciones sobre las dificultades económicas del colimense en el
extranjero son recurrentes en la correspondencia oficial resguardada y con ella podríamos
conocer más detalles cotidianos sobre la carrera diplomática en el siglo xx.
Dato curioso:
Entre Suiza y el ahmc hay una distancia aproximada de
9,909 km.
Como queda dicho, la riqueza del fondo en cuestión es relevante y para hacer énfasis en ello
esta
entrada la destinamos a uno de los documentos que Balbino Dávalos redactó en Rusia.
En una hoja con la leyenda “Legación de los Estados Unidos Mexicanos en Rusia” nuestro
personaje
hace un recuento de la situación en la que la encontró. Escrita con abreviaturas y
contracciones
en la mayoría de las palabras, en el breve texto el autor deja constancia de que la oficina
se
encontraba en notorio descuido, incluso comenta que cartas que él mismo escribió aún estaban
sin
abrir, y no se reserva la sorpresa de tal situación; informa que se ocupó de revisar la
correspondencia y de “imponerme del arch[ivo] que por tan escas[o] no me requi[rió] m[u]cho
t[iem]po”.
La misión diplomática de nuestro viajero sólo duró 67 días. Cabe resaltar que el 30 de
diciembre
de 1913 Victoriano Huerta designó en el cargo a Dávalos, pocos meses después este último
escribió al entonces presidente del régimen golpista para agradecer el nombramiento y
proporcionarle detalles sobre el encuentro con el representante del gobierno de los Estados
Unidos. En julio de 1914 Huerta tuvo que dimitir. Venustiano Carranza disolvió el ejército
federal y luego de instituir el Constitucionalista asumió el Poder Ejecutivo el 14 de
agosto.
Otra de sus medidas para desconocer al gobierno usurpador fue decretar el cese de todos los
integrantes del Servicio Exterior, entre éstos, Dávalos. A la gran mayoría de funcionarios
no se
les notificó y muchos de ellos se enteraron por comunicaciones diversas, algunos iniciaron
en
cierto sentido una especie de peregrinaje para regresar al país, otros, para instalarse en
algún
lugar seguro en medio de la Primera Guerra Mundial. En el caso de nuestro personaje podemos
anticipar que el apoyo a Huerta dificultó su regreso llevándolo a continuar su vida en
diferentes lugares.
Dato curioso:
La posible distancia que debió recorrer este documento podría ser de poco más de
11,214.98 km.
Después de septiembre de 1914, y luego de que el gobierno constitucionalista de Carranza
cesara
las funciones del Servicio Exterior, Balbino Dávalos y su familia se instalaron en Nueva
York,
aunque también llegó a impartir clases en la Universidad de Minnesota, en el Departamento de
Lenguas Romances, por lo que podemos considerar ese traslado para desempeñar su trabajo
docente.
Regresar a México le llevaría tiempo y gracias a la intervención y apoyo de otros
connacionales
pudo reincorporarse al Servicio Exterior.
En este registro mostramos la media plana del periódico The New York
American con el
retrato de
nuestro personaje como embajador de Alemania al lado superior derecho, y se indica que
partió en
el barco S. S. Lafayette un día antes de que se publicara la
nota en cuestión. En
todo el
archivo podemos encontrar otras referencias sobre el lugar que nos ocupa en esta entrada,
tal es
el caso de una carta de 1951 en la que Rafael Krantesi con motivo de la muerte de Dávalos
expresa sus condolencias y evoca un recuerdo en Nueva York en “la época del destierro”.
Dato curioso:
La distancia entre Nueva York y el ahmc es de
aproximadamente 9,874.74 km.
Esta identificación con fotografía y escrita en alemán forma parte de los testimonios
oficiales
que se conservan en el fondo Dávalos. La que aquí mostramos es relativa a su misión como
Enviado
Extraordinario y Ministro Plenipotenciario en Alemania, cargo que le fue otorgado el 28 de
junio
de 1920, aunque no fue sino hasta el 26 de agosto de 1921 que el colimense presentó sus
cartas
credenciales en el país europeo y a diferencia de su encargo en Rusia, éste duraría hasta
junio
de 1922.
Entre los testimonios que se conservan en el archivo y la biblioteca personal de Dávalos
podemos
apreciar que aunado a su trabajo como diplomático también se involucró en la vida
intelectual
del país. Por otra parte, previo a su nombramiento, pasó algunas temporadas en Berlín, ya
fuera
por convalecencia o en busca de oportunidades para que su hijo mayor, Manuel, continuara sus
estudios.
Dato curioso:
La distancia entre Alemania y el ahmc es aproximadamente
de 9,916.86 km.
Sabemos que al menos en julio de 1920 Dávalos ya se encontraba camino a ocupar la Legación en
Alemania, aunque el acto oficial se realizó casi un año después. A los pocos días fue
nombrado
Enviado Extraordinario y Ministro Plenipotenciario en Suecia, así que el 9 de diciembre de
1921
presentó sus cartas credenciales y luego de siete meses finalizó esa misión.
En este recorte de la prensa sueca se muestra un retrato de Balbino Dávalos y el título de
la
nota indica la cobertura de la charla sobre política del primer ministro con el corresponsal
del
diario Aftonbladet. Este documento es en cierto modo una
invitación a explorar la
trayectoria de
nuestro personaje y los testimonios que dejó en países en los que además de la distancia nos
separa el idioma. Después de las misiones en Alemania y Suecia, Dávalos regresó a México
finalizando así el periodo de las travesías, los viajes transatlánticos y las ciudades
desconocidas.
Dato curioso:
La distancia entre Suecia y el ahmc es de aproximadamente
9,808.85 km.
Después de sus últimas misiones diplomáticas, Dávalos regresó a nuestro país y se dedicó
principalmente a la docencia, además de ocupar puestos administrativos, como una brevísima
rectoría de la Universidad Nacional de México por apenas 30 días. También asumió la
dirección de la Facultad de Filosofía y Letras entre los años de 1925-1928, y quienes se han
encargado de estudiar la historia de esta institución refieren que en su gestión se
impulsaron los primeros planes de estudio y se comenzó la ardua tarea de dotarla de una
estructura y una organización académica adecuadas.
En 1928 Dávalos presentó su renuncia a la Secretaría de Educación Pública (sep) argumentando
que tenía una comisión que atender fuera de la ciudad por lo que no podría seguir dirigiendo
la Facultad. Fue nombrado jefe de la Oficina Federal de Hacienda de Colima y alternó el
cargo impartiendo las clases de lengua y literatura castellana, filología romántica y
literatura latina y griega. Las últimas décadas de su vida las pasó entre la Ciudad de
México y Colima y poco a poco sus actividades fueron disminuyendo. Falleció el 2 de octubre
de 1951 y fue sepultado en el Panteón Español. El 19 de octubre de 2012 las cenizas del
poeta y su primera esposa, Jovita Anaya, fueron trasladadas a Colima y depositadas en el
ahmc.
Dato curioso:
La distancia entre la Ciudad de México y el ahmc es de
aproximadamente 474.10 km.
El primer día de diciembre del año de 1902 el periódico El Campeón del Pueblo publicó una nota...
La obra del noruego Carl Lumholtz cuyo título abreviado es El México desconocido...
“Sus versiones son de tal suerte perfectas y meritorias, que igualan, cuando no superan...
La carta mecanuscrita fue fechada en Chihuahua el 1° de mayo de 1905 y remitida a la Ciudad de México...
En el fondo Dávalos abundan los testimonios...
Uno de los detalles sumamente cautivadores de nuestro personaje son los constantes viajes...
Este manuscrito fue creado tentativamente por el diplomático chileno Marcial Martínez de Ferrari...
Otra de las particularidades del fondo Dávalos es su variedad lingüística. En esta entrada...
Este documento forma parte de la correspondencia oficial que reunió durante su vida profesional Balbino...
Como queda dicho, la riqueza del fondo en cuestión es relevante y para hacer énfasis en ello esta...
Después de septiembre de 1914, y luego de que el gobierno constitucionalista de Carranza...
Esta identificación con fotografía y escrita en alemán forma parte de los testimonios oficiales...
Sabemos que al menos en julio de 1920 Dávalos ya se encontraba camino a ocupar la Legación...
Después de sus últimas misiones diplomáticas...
El recorrido propuesto en esta exposición es apenas uno de los múltiples que se pueden trazar gracias a la documentación del fondo Dávalos. Reflexionar brevemente sobre aquellas ciudades y países de los que nos informan los diversos testimonios es un ejercicio provocador para que sigamos consultando los archivos y bibliotecas municipales, estatales y nacionales. La muestra también busca despertar interés en los lectores, además de promover la conciencia de las adversidades y situaciones que los documentos,
fotografías, libros y objetos diarios enfrentan con el paso del tiempo y cómo estos recintos hacen frente a la pérdida material de aquello que custodian y que son fundamentales para el resguardo de la memoria colectiva de nuestro país. El 70 aniversario luctuoso del humanista Balbino Dávalos es una significativa excusa para recordarlo, para resaltar su trayectoria y el magnífico trabajo de rescate y organización del Archivo Histórico del Municipio de Colima.