Narración
*Se recomienda escucharla con audífonos
¿Alguna vez has escuchado la frase: “el futbol es un juego de hombres”? Incluso en el siglo xxi, todavía hay personas que lo creen. Durante mucho tiempo se consideró que el balompié era una actividad exclusiva de los hombres. A pesar de eso, ellas no eran ajenas a este deporte y, en México, algunas lo jugaban ocasionalmente desde los años treinta. ¿Te imaginas? ¡Varias jugaban a escondidas! Sin embargo, fue hasta la década de 1960 cuando el interés de niñas y jóvenes por el futbol creció, luego de que algunos equipos femeniles extranjeros hicieran giras por México.
“Jugada riñonuda de las damas”.
El Informador, 6 de mayo de
1963, p. 4 B.
El equipo América de Costa Rica.
El Informador, 6 de mayo de
1963, p. 4 B.
Soplaban tiempos de cambio y la segunda ola del feminismo se fortalecía. Con ella, las mujeres defendían la maternidad voluntaria, la libertad sexual y el derecho a desarrollarse fuera del ámbito doméstico. En ese marco, las mexicanas reclamaron su derecho a jugar futbol. En noviembre de 1969 se organizó el primer campeonato en el Distrito Federal y en febrero de 1970 se formó la Asociación Mexicana de Futbol Femenil (amff).
Anuncio de un partido de futbol femenil, ambos equipos costarricenses.
El Informador, 4 de mayo de 1963, p. 4 Bb.
Mujeres jugando futbol en el campo 37 de la Ciudad Deportiva de la
Magdalena Mixhuca.
El Heraldo de México, 1 de diciembre de 1969, p. 2 B.
Narración
*Se recomienda escucharla con audífonos
En febrero de 1970 se creó la Federación Internacional Europea de Futbol Femenil (fieff). Este organismo invitó a la Asociación Mexicana de Futbol Femenil a participar en el primer mundial de la especialidad entre el 7 y el 15 de julio. La sede fue Italia. A pesar de que la Federación Internacional de Futbol Asociación (fifa) no reconoció el torneo, participaron las selecciones de Austria, Suiza, Inglaterra, Dinamarca y República Federal de Alemania, además de las anfitrionas.
Caricatura sobre la primera selección femenil mexicana.
El Universal
Gráfico, 3 de julio de 1970, p. 2.
La Selección Mexicana antes de partir a Italia.
El Heraldo de
México, 29 de junio de 1970, p. 4 B.
La Selección Mexicana durante el primer mundial femenil. Colección: Martha Coronado.
La Selección Mexicana, sin ningún tipo de apoyo por parte de la Federación Mexicana de Futbol (fmf), partió a Italia en condiciones críticas, sin dinero y con pocos meses de entrenamiento. ¿Cómo crees que enfrentaron ese reto? ¡Adivinaste! Fueron las familias de las jugadoras y la fieff quienes solventaron los gastos.
En el primer encuentro, las mexicanas sorprendieron al mundo y vencieron a Austria por 9 a 0. Luego de superar la fase de grupos pasaron a semifinales y cayeron contra Italia por 2 a 1, pero en el juego por el tercer lugar vencieron a Inglaterra 3 a 2.
Narración
*Se recomienda escucharla con audífonos
Después del mundial, las mexicanas realizaron partidos de exhibición en la Ciudad de México y Jalisco. ¡Ninguna selección de futbol había obtenido un tercer lugar mundial! Por eso la afición tuvo una respuesta positiva, llenó los estadios y dejó muchas ganancias a los organizadores. Sin embargo, las jugadoras no recibieron ningún tipo de pago por su labor. En ese contexto, el promotor Jaime de Haro propuso solicitar la sede del segundo campeonato mundial.
Trofeo en disputa durante el II Campeonato Mundial.
El Heraldo de
México, 30 de agosto de 1971, p. 2 B.
Porterías del Estadio Azteca pintadas de blanco y rosa.
El Heraldo de
México, 16 de agosto de 1971, p. 1 B.
En diciembre de 1970, el congreso de la fieff eligió a México como sede luego de superar en la votación a España, Suiza y Luxemburgo. Nuestro país organizaría su segundo mundial en menos de dos años. Uno de los patrocinadores del torneo fue la marca de bebidas alcohólicas Martini y Rossi, quien también lo fue el año anterior. Además, como parte del programa publicitario, el comité organizador presentó a “Xóchitl”, la caricatura de una niña mexicana vestida con el uniforme de la selección. Fue entonces cuando nuestras compatriotas iniciaron una difícil preparación que incluyó enfrentamientos con equipos femeniles locales, así como una gira por Argentina y Perú.
Alicia Vargas y Martha Coronado después de un entrenamiento.
Colección:
Martha Coronado.
Seleccionadas mexicanas.
Colección: Martha Coronado.