Presentación

En diciembre de 2018 se debatía el destino y la función de la Colección Pictórica Residencia Oficial de Los Pinos, que se sabía a resguardo en una bodega dependiente de la Oficina de la Presidencia de la República. La obra allí contenida fue solicitada por el ex presidente Carlos Salinas de Gortari a un grupo de artistas y se exhibió, completado el encargo, el 6 de noviembre de 1993 en el salón Adolfo López Mateos de la Residencia Oficial.

En el texto de presentación que acompaña al catálogo que se hizo para aquella muestra, el propio presidente Salinas de Gortari escribió: “se buscó que estuvieran representadas con la mayor pluralidad posible y con el único denominador común de su calidad artística, las generaciones, propuestas y tendencias más significativas de la plástica contemporánea […] enriquecer la cultura nacional […] para representar la profundidad espiritual del pueblo de México […]”. La Oficina del Ejecutivo Federal esperaba que aquel núcleo de 33 obras fuera el principio de una colección creciente y a continuarse por quienes detentaran ese cargo en el futuro. Entre los que asesoraron a Salinas en aquella ocasión estuvieron Graciela de la Torre, Gerardo Estrada y Rafael Tovar y de Teresa.

La Jornada daba cuenta de una carta fechada el 4 de diciembre de 2018, donde Francisco Toledo y otros artistas preguntaban a la secretaria de Cultura, Alejandra Frausto Guerrero, por aquellas obras de su autoría. Y cita: “tomando en cuenta que la residencia de Los Pinos pasa a ser patrimonio cultural del país, nos preguntamos si es posible conocer la ubicación y el estado de las pinturas realizadas en 1993 para dicha residencia por encargo del entonces presidente Carlos Salinas de Gortari […]” Es claro que de la enajenación de bienes y de su declaratoria como patrimonio público nacional es de lo que en el fondo discuten el texto presentado al pleno del Senado y la hemerografía aquí recogida. Ése es el contenido último que a Memórica. México, haz memoria le interesa.