Gildardo Magaña
a Jenaro Amezcua,
campamento revolucionario en el estado de Morelos, 24 de junio de 1919
Habían pasado poco más de dos meses desde la muerte de Zapata cuando los jefes del ejército se reunieron con el objetivo de reactivar el movimiento que Carranza creía sepultado. Nombrado comandante del ejército libertador del sur, Gildardo Magaña escribió esta carta con la intención de actualizar a Jenaro Amezcua, representante zapatista en La Habana (Cuba), acerca de los últimos acontecimientos relacionados tanto con la vida interna del zapatismo como de la realidad política nacional. Magaña consideró necesario hacer un recuento de los hechos para darle claridad a Amezcua sobre lo acontecido.
La carta menciona la inclusión de algunos manifiestos, como aquel en el que Zapata designaba al doctor Francisco Vázquez Gómez jefe supremo de la revolución. Magaña señalaba también que las discordias entre los zapatistas se habían eliminado, mientras que la facción carrancista estaba dividida. Llama la atención el énfasis puesto por Magaña en la separación de Álvaro Obregón de las filas del carrancismo. Dedica varios párrafos a la descripción de un manifiesto de Obregón en contra de Carranza, sus seguidores y la propia administración, y en el anuncio de una nueva etapa de guerra civil si el presidente insistiera en imponer a Pablo González en las próximas elecciones. Parece premonitorio: antes de un año, Magaña se aliaría con Obregón para derrocar al gobierno de Carranza.