Entre el 24 de febrero y el 24 de agosto de 1821 la Nueva España vivió momentos definitorios en su lucha por la independencia. En febrero de aquel año el coronel Agustín de Iturbide proclamó el Plan de Iguala. Como era parte de las tropas realistas tuvo que convencer a los insurgentes para que apoyaran su proyecto. Vicente Guerrero, su líder más visible, respaldó a Iturbide en el mes de marzo. De esta manera se emprendió una campaña político-militar con el fin de conseguir la adhesión de la mayoría de las tropas leales al gobierno virreinal.
Las operaciones militares en realidad fueron pocas y sin mucha violencia. Las plazas defendidas por las tropas realistas fueron capitulando una tras otra. Tanto en el centro como en el occidente y el oriente del virreinato se sumaron al Plan de Iguala fuerzas realistas. Para el mes de agosto, prácticamente todas las regiones estaban en manos del ejército independentista de las Tres Garantías o Trigarante. Sólo quedaban en posesión de los peninsulares Veracruz y la ciudad de México.
Después de la firma de los Tratados de Córdoba el avance del ejército de las Tres Garantías continuó su marcha hacia la ciudad de México que, mediante las autoridades realistas, decidieron defender la capital de la Nueva España. Sin embargo, tanto la fuerza de las armas independentistas como la presión de Juan O’Donojú, inclinaron la balanza a favor de las tropas dirigidas por Agustín de Iturbide.
Esta exposición contiene algunos documentos que forman parte de distintos expedientes de la Dirección General de Archivo e Historia de la Secretaría de la Defensa Nacional sobre este periodo, febrero-septiembre de 1821. La muestra la integran una selección de testimonios que ilustran de qué manera se fue ganando terreno en lo político y lo militar a los largo de esos meses para culminar con la firma de los Tratados de Córdoba y los preparativos cívicos y militares que se dieron para que el Ejército Trigarante finalmente entrara a la ciudad de México y proclamara la independencia.
Memórica tiene una exposición virtual sobre el
Te invitamos a visitarla para conocer los antecedentes de los Tratados de Córdoba.
Copia manuscrita del Plan de Iguala
El 24 de febrero de 1821 el coronel Agustín de Iturbide, miembro del
ejército realista que combatía a los insurgentes, difundió un plan político en la
localidad de Iguala que proclamaba la “Independencia del Imperio Mexicano”. Éste fue el
inicio de un proceso relativamente rápido y de violencia esporádica, que concluyó el 24
de agosto con la firma entre Iturbide y Juan O’Donojú, representante de España, de un
acuerdo que reconocía la independencia de lo que entonces se llamó Imperio Mexicano.
En Memórica se cuenta con varios ejemplares sobre este documento conocido como Plan de
Iguala. Aquí mostramos una copia manuscrita.
Acta manuscrita del juramento del Plan de Iguala
En muchas ocasiones, las adhesiones al Plan de Iguala se acompañaban de actos de cierta solemnidad que reforzaban el carácter simbólico de estos movimientos político-militares. Uno de ellos fue el juramento de dicho plan. Aquí podemos observar el juramento del Plan de Iguala, ante el capellán Fernando Cárdenas, por los coroneles Iturbide y Rafael Ramiro, así como los jefes y oficiales del Batallón de Celaya.
Carta de Vicente Guerrero a Agustín de Iturbide
Iturbide entró en comunicación con las tropas de Vicente Guerrero con el fin de que éste apoyara su plan político. El jefe insurgente decidió unirse al movimiento independentista de Iturbide. En esta carta que aquí presentamos, Guerrero confirma que pondrá al servicio del ejército de las Tres Garantías sus tropas y que él mismo se asume como un “subordinado militar”. Cinco días después de escribir este comunicado a Iturbide, Guerrero se adhirió al Plan de Iguala.
Correspondencia sobre la guerra de Independencia en diversos estados
Desde el proceso de elaboración del Plan de Iguala, Iturbide intentó que el virrey Juan Ruiz de Apodaca lo aprobara e, incluso, se pusiera al frente del proyecto independentista. El virrey, el conde de Venadito, consideró siempre “anticonstitucional” el proyecto de Iturbide y trató de combatirlo desde el inicio de la proclama de Iguala. Este expediente contiene documentación de febrero y marzo de 1821.
Correspondencia entre Agustín de Iturbide y Antonio de Bais referente al Movimiento de Independencia en Michoacán
Esta carta que Antonio de Bais dirige a Agustín de Iturbide es un ejemplo del entusiasmo general de muchos integrantes de las tropas realistas por el Plan de Iguala pero tuvieron que esperar la decisión de sus jefes militares. Este documento, que corresponde a un expediente de 15 folios, abarca los meses de marzo a abril con correspondencia de Antonio de Bais, de Tacámbaro, Michoacán, a Agustín de Iturbide.
Celebra su nombramiento como diputado a las Cortes venideras y le avisa saber de los nombramientos de Juan O´Donojú y Carlos España como capitán general con sueldo de virrey de la Nueva España y gobernador de Veracruz, respectivamente
Destacamos esta comunicación entre Pedro de Fonte, arzobispo de México, y Juan Cruz Ruiz, obispo de Guadalajara, porque menciona el nombramiento de Juan O’Donojú como capitán general de la Nueva España, “con sueldo de Virrey”, ya que este cargo había desaparecido como tal con el restablecimiento de las Cortes en 1820. O´Donojú, como veremos más adelante, fue crucial en el reconocimiento temporal de la Independencia de México por parte de España.
Correspondencia entre el coronel Antonio López de Santa Anna y Agustín de Iturbide con motivo del Movimiento de Independencia
El oriente del virreinato empezó a caer pronto una vez que se proclamó el Plan de Iguala. Orizaba se tomó el 28 de marzo y Alvarado el 25 de abril por las fuerzas de Antonio López de Santa Anna. Al mes siguiente tomó Jalapa controlando prácticamente todo Veracruz con excepción del puerto. El expediente contiene correspondencia entre Santa Anna e Iturbide entre abril y noviembre de 1821. Este general fue de gran relevancia para la historia de México durante toda la primera mitad del siglo xix.
Correspondencia entre el teniente coronel Agustín Fuentes y Agustín de Iturbide con motivo del Movimiento de Independencia
En el centro del país, la capital del virreinato, se dieron adhesiones masivas al Plan de Iguala. En este documento se expone un ejemplo de cómo tropas realistas de Toluca se pasan al bando independentista. La carta está firmada en Zitácuaro, por lo que para el mes de mayo gran parte del occidente del territorio se encontraba en manos de los iturbidistas.
Correspondencia entre el Jefe Político de Valladolid y Agustín de Iturbide referente al Movimiento de Independencia
La capitulación de Valladolid fue un duro golpe para el gobierno realista. Durante los días de la negociación de la entrega de esta plaza las deserciones de las tropas virreinales se incrementaron al pasar éstas al bando independentista. Los pocos soldados que permanecieron leales a las autoridades salieron con rumbo a la ciudad de México. El expediente consta de sólo cinco folios y contiene la correspondencia que el Jefe Político de Valladolid, al parecer Ramón Huarte, cuñado de Iturbide, mantuvo con éste entre el 21 y 23 de mayo.
Correspondencia entre Joaquín Parres y Agustín de Iturbide relacionada con el Movimiento de Independencia
Las operaciones en el Bajío también tuvieron éxito en cuanto a las adhesiones al Plan de Iguala. Querétaro resistió al embate independentista hasta el 20 de junio, día en el que las fuerzas realistas se rindieron ante el Ejército Trigarante. Este expediente consta de 28 folios y abarca el periodo de abril a julio de 1821 sobre las operaciones de los independentistas en Querétaro y Guanajuato.
Correspondencia del capitán Ignacio del Valle con Agustín de Iturbide relacionada con el Movimiento de Independencia
Para finales de junio y principios de agosto se fue creando un cerco a la capital del virreinato. Las fuerzas realistas abandonaron todas las plazas importantes y se concentraron en el puerto de Veracruz y la ciudad de México. La mención en distintos documentos a los pocos tiros realizados para la toma de ambos sitios es recurrente.
Correspondencia de Agustín de Iturbide con Juan de O’Donojú
Al desembarcar Juan O’Donojú en Veracruz, Agustín de Iturbide casi de inmediato se puso en contacto con él. (La primera carta que O’Donojú envía a Iturbide es del 6 de agosto y éste le responde el 11.) En una misiva dirigida al Jefe Político español, Iturbide manifiesta el agrado de compartir las mismas ideas respecto al futuro de la Nueva España. Presentamos un expediente que consta de 10 folios y que contiene correspondencia entre O’Donojú e Iturbide entre el 11 de agosto y el 9 de septiembre de 1821.
Correspondencia del mariscal de Campo Francisco Novella con don Agustín de Iturbide, relacionada con el Movimiento de Independencia
Francisco Novella se quedó al frente del virreinato cuando Juan Ruiz de Apodaca fue
destituido por los jefes realistas por su incapacidad para detener el avance de las
fuerzas trigarantes. Novella cerró cualquier posibilidad de negociación con los
independentistas pero, al arribo de Juan O’Donojú al puerto de Veracruz a finales de
julio, se puso a las órdenes de éste.
En la documentación de este expediente, que abarca el periodo del 11 de agosto al 11 de
septiembre, se observan acuerdos entre Iturbide y Novella para que éste pueda entregar
comunicados al nuevo Jefe Político de la Nueva España Juan O’Donojú.
Tratados celebrados en la Villa de Córdoba
El 24 de agosto Agustín de Iturbide y Juan O’Donojú se reunieron en la villa de Córdoba.
Después de “haber conferenciado detenidamente sobre lo que más convenía a una y otra
nación atendiendo al estado actual” firmaron los “Tratados celebrados en la villa de
Córdoba”. En éstos se reconocía el Imperio Mexicano como nación soberana e independiente
cuyo sistema de gobierno sería una monarquía constitucional moderada. El documento
llamaba al rey Fernando VII a gobernar el nuevo Imperio Mexicano. Si éste no aceptaba,
se convocaba a que lo hicieran miembros de su familia. En caso de que ningún familiar de
los mencionados aceptara la Corona del Imperio Mexicano, las Cortes del nuevo Imperio
designarían al soberano, y si no existiera una figura de poder se conformaría una Junta
provisional de gobierno a la que habría de pertenecer Juan O’Donojú.
Para que este tratado tenga efecto, se lee en el documento, será necesario vencer al
ejército realista que ocupa la capital del virreinato. Sin embargo, con el fin de evitar
un enfrentamiento que podría volverse sangriento, O’Donojú se ofrecía a negociar con las
tropas realistas una “capitulación honrosa”.
Con los Tratados de Córdoba se cerró un nuevo capítulo en el proceso de la consumación
final de la Independencia de México. Aún restaba, como advierte el documento, que las
tropas de la Península abandonaran la capital del virreinato.
Documentación diversa con respecto a la culminación de la firma y rendición de la Guerra de Independencia
El 30 de agosto de 1821, a una semana de haberse celebrado la firma de los Tratados de Córdoba, las autoridades de la ciudad de México rechazaron la validez del documento firmado por Juan O’Donojú con el argumento de tener la certeza de que éste venía con todas las credenciales para llegar a acuerdos de esta naturaleza. Le reclamaron a O’Donojú que no defendiera con las armas a “España hasta morir”. La junta, se lee al final del documento, concluyó al oírse cañonazos por el rumbo de Tacuba.
Documentación diversa con respecto a la culminación de la firma y rendición de la Guerra de Independencia
El Mariscal de Campo Francisco Novella, quien había, de alguna manera, facilitado el acercamiento entre Iturbide y O’Donojú cuando éste desembarcó en Veracruz, rechazó el 31 de julio, en carta dirigida a este último, los Tratados de Córdoba. Novella, que sustituyó a Ruiz de Apodaca cuando éste fue destituido como virrey, gozaba de la más alta autoridad entre los miembros de las fuerzas realistas. En esta correspondencia dirigida a O’Donojú lo conmina a presentarse en la ciudad de México porque hay muchas voces, afirma Novella, que lo acusan de traidor, y sería conveniente que aclarara bien la situación. En los hechos, Novella desconocía la firma de O’Donojú en los Tratados de Córdoba.
Documentación diversa con respecto a la culminación de la firma y rendición de la Guerra de Independencia
El 3 de septiembre de 1821 las tropas realistas entregaron la plaza de Durango. Con esta capitulación se reforzó el avance del ejército de las Tres Garantías por el norte del virreinato. Uno de los artículos destaca que las tropas realistas que abandonen esta plaza de Durango, por ningún motivo participarían en defensa de la ciudad de Veracruz o ciudad de México en caso de que éstas sean sitiadas por el Ejército Trigarante. Se trata de un convenio de cierta extensión que, de forma detallada, define cómo se procederá la entrega de la plaza y hacia dónde se dirigirán las fuerzas realistas.
Documentación diversa con respecto a la culminación de la firma y rendición de la Guerra de Independencia
En un extenso documento el Ayuntamiento de México reclama la decisión de ciertas autoridades realistas de rechazar los acuerdos conseguidos entre Agustín de Iturbide y Juan O’Donojú en Córdoba. El Ayuntamiento señala: “… continuar la resistencia (hasta aquí gloriosa) que ha hecho la Capital, es ya empresa ilegal, del todo inútil y de consecuencias funestísimas”. Por ello, se opuso a la decisión de Novella de mantener la resistencia en la capital del virreinato ante el avance de las fuerzas independentistas. El documento concluye “… este cabildo espera de usted que ponga ya de una vez término al desorden y males que hemos sufrido y a los incomparablemente mayores que nos amagan si se continúa la oposición y que tenga usted la gloria de hacer la felicidad de un pueblo, cuya suerte dichosa o desgraciada a puesto en sus manos esa inefable providencia que trastorna los imperios y regla la suerte de los reinos”.
Correspondencia del Mariscal de Campo Francisco Novella, con Don Agustín de Iturbide, relacionada con el Movimiento de Independencia
El 7 de septiembre se firma un armisticio entre las tropas del Ejército Trigarante y las realistas que defienden la ciudad de México. Según consta en el documento hubo una equivocación en la marcha de los comisionados al dirigirse a Tacubaya en lugar de la Hacienda de Los Morales. Este acercamiento estaba relacionado con un cambio en el documento que contenía las condiciones para lograr un armisticio.
Correspondencia del Mariscal de Campo Francisco Novella, con Don Agustín de Iturbide, relacionada con el Movimiento de Independencia
Este documento demuestra que el armisticio pactado entre las tropas del Ejército Trigarante y las que defendían la ciudad de México no estaba del todo bajo control. Sin duda hubo algunas escaramuzas entre ambos ejércitos. Sin embargo, este documento quizás muestre cierta desesperación de quedarse solo frente al avance de las fuerzas independentistas que se dirigen a la ciudad de México. A pesar de la entrada inminente del Ejército Trigarante a la capital del virreinato al parecer existió cierta tensión entre las armas de ambos ejércitos.
Documentación diversa con respecto a la culminación de la firma y rendición de la Guerra de Independencia
El 12 de septiembre de 1821, a las 12 de la noche, desde el Convento de las Carmelitas de San Joaquín, en Tacuba, ya muy cerca de la ciudad de México, Juan O’Donojú dirigió una carta a Francisco Novella. En ésta quizás le daba una última oportunidad para que se apegara a los acuerdos firmados en Córdoba. Se trata de un documento extenso, de seis fojas, en el que O’Donojú aprovecha para explicarle a Novella la importancia de aceptar la independencia de la Nueva España. Concluye su comunicación con una advertencia: “Si concluido el armisticio no he recibido contestación de usted declararé incursas a todas las autoridades y tropas que le obedezcan en las mismas penas que usted lo está”.
Documentación diversa con respecto a la culminación de la firma y rendición de la Guerra de Independencia
Para el mismo 12 de septiembre, Novella, con el respaldo de las autoridades “eclesiásticas, civiles y militares” de la Ciudad de México, como señala en su carta, aceptaron la entrevista con Juan O’Donojú. La advertencia de éste en la correspondencia anterior tal parece que dio resultado o Novella consideró que cualquier opción de resistir era prácticamente inexistente. La entrevista se efectuó el día siguiente, 13 de septiembre, y también estuvo presente Agustín de Iturbide. En ésta se acordó la entrega de la Ciudad de México.
Documentación diversa con respecto a la culminación de la firma y rendición de la Guerra de Independencia
Para el 23 de septiembre las tropas realistas de la ciudad de México abandonan la plaza para permitir la entrada de cuatro mil efectivos militares del Ejército Trigarante. De esta manera quedaba el paso libre para que las tropas independentistas, lideradas por Iturbide y Guerrero, tomaran las calles de México. Después de algunas resistencias mostradas por autoridades realistas por abandonar la capital de la Nueva España, todas aceptaron la nueva realidad.
Oficio del Generalísimo Agustín de Iturbide avisando que el 27 de septiembre hará su entrada el Ejército Trigarante a esta capital y adjunta la lista de las personas que deben formar la junta de Gobierno
Desde Tacubaya, Agustín de Iturbide emite un oficio con el aviso de la entrada del ejército imperial a la ciudad de México el 27 de septiembre. En este documento también anuncia que inmediatamente se instalará el Gobierno Provisional por lo cual adjunta un listado de quienes habrán de formar parte de éste.