Hagiografía jesuítica. Vidas de miembros insignes de la Compañía de Jesús
En esta colección reunimos algunas hagiografías escritas por jesuitas. Estas singulares obras llamadas “Vidas” tenían por objeto el proteger del olvido a los miembros predecesores de la Compañía. Desde principios del siglo XVII, los ignacianos comenzaron una abundante elaboración de compilaciones biográficas y elogios fúnebres en honor a sus compañeros distinguidos, considerados como ejemplo de conducta. Era común que discípulos escribieran sobre sus mentores y expresaran las acciones que los volvieron célebres.
Tales textos eran relatos prodigiosos que exploraban la vida tanto interior como exterior del protagonista, posicionándolo en el lugar del héroe literario al estilo, casi, de las novelas de caballería y enalteciendo siempre sus méritos. Las virtudes consideradas como las más elevadas eran las relacionadas con los votos religiosos: la pobreza, la humildad, la castidad y la obediencia. Dichas cualidades sólo podían cumplirse bajo los preceptos de una firme y rigurosa disciplina. Contratiempos, mortificaciones y renuncia a las comodidades eran sucesos habituales en las hagiografías jesuitas.
